El este siempre ha sido sinónimo de misterio, secreto, ciertas filosofías y creencias a través de las cuales se interpreta la vida. El este de Serbia, también alberga muchos elementos de una vida imaginativa. Dondequiera que vaya en el este de Serbia – sea la poderosa Puerta de Hierro (Djerdap) o los hermosos pueblos alrededor del lago Bujanovačko – le esperan interesantes lugares. Aquí, más que en cualquier otro lugar en Serbia, la realidad y la leyenda se mezclan hasta tal punto que es difícil saber dónde termina una y donde empieza la otra.
Los principales ríos siempre han definido la vida de la gente. Las terrazas naturales del Danubio, con su suelo fértil y sano, han dado lugar a que diferentes poblaciones se establezcan a lo largo de sus orillas plagadas de peces,plantas frutales y viñedos. Muchos pueblos con sus alojamientos atienden a los turistas, cerca de Donji Milanovac, Kladovac, Golubac, Majdanpek o Negotin, y que se asegurarán de que esté tan cómodo como integrado.
Timočka Krajina también es conocida por su tradición de cultivo de la vid. Las condiciones en esta región son ideales para el cultivo de la vid común. Desde el pueblo de Rajac, a 15 minutos, se llega a las bodegas de Rajačke Pimnice, a través de un camino que pasa por hermosos bosques en los que los entusiastas recogen setas, flores de saúco y hojas de bálsamo de limón, para después hacer un té muy relajante. En esta región, en áreas cercanas a Zaječar, Knjazevac, Boljevac, Sokobanja y Bor, los anfitriones le sirven estofado de venado, caldo de ortiga y un pasulj prebanac (fabada) como ninguna otro.Belmuž, que es un kačamak (una especie de polenta) a base de harina de maíz blanco, es una famosa especialidad de la Serbia oriental. Se prepara con queso de cabra joven, sin sal, servida caliente con leche de cabra.
Muchos mitos giran en torno a la montaña Rtanj. Crea o no, el aire, los alimentos y las plantas medicinales de esta zona realmente están en la frontera de lo mágico. Los vientos de las montañas de los Cárpatos, el Mar Adriático y las llanuras del norte se encuentran aquí, así que no sólo se siente los beneficios del aire fresco y puro, sino también en esencia se respira una “medicina” que lo libera de la tos, limpia los pulmones y fortalece el sistema inmunológico. La comida regional es excepcional, y de la variada selección hay que insistir en que pruebe la gibanica (pastel de queso y huevo), el kiselo mleko (leche) y cada una de las especialidades de setas y caza. No se olvide de comprar o elegir por sí mismo los ingredientes para el famoso té de Rtanj, que sólo crecen en la base de esta montaña mágica.
Homolje es una región especial en el este de Serbia. Una de sus características únicas es su desfiladero, incluyendo Gornjačka y Ribarska, así como los desfiladeros tallados por los ríos Velika y Mala Tisnica, Osanička y Do. El manantial de Vrelo Mlave tiene un especial atractivo turístico. El río Morava fluye a través de la región de Braničevo, en donde la ciudad de Požarevac le invita a la granja Ljubičevo para disfrutar de los Juegos ecuestres que se celebran cada mes de septiembre.
Y hacia el sudeste se encuentra la ciudad de Pirot y sus alrededores, popularizada por las Pirot ćilims (alfombras tejidas), que se hacen a mano en los telares de los pueblos cercanos de la montaña Stara Planina. Las alfombras están dominadas por el color rojo y los patrones decorativos geométricos, con un pájaro estilizado, flores, una paloma o elementos que se encuentran en las zonas locales. Los platos tradicionales realizados en Pirot son exclusivos de la región. Se incluyen los paquetes de hojas de vid rellenas de despojos de cordero, čorba ćisalica (caldo), uštipci od krompira (bolas fritas de patata) y cualquier combinación con pimientos.
La Fortaleza de Smederevo (Smederevska Tvrdjava), así como las fortalezas de Ram y Golubac, se encuentran a orillas del Danubio. Uno de los cañones más bellos de Europa, el Djerdapska Klisura (Puerta de Hierro), incluye bajo el mismo nombre un Parque Nacional y una planta de energía hidroeléctrica. El arte del asentamiento pre-histórico de Lepenski Vir – con esculturas de dioses en piedra y en forma de peces-, ha captado la atención del mundo. Los restos de Viminacium, que era la ciudad capital de la provincia romana de Moesia Superior y un importante campamento militar, se localizan cerca de Kostolac. Felix Romuliana, cerca de Zaječar, es uno de los ejemplos más complejos y excelentes de la arquitectura romana y se encuentra bajo protección de la UNESCO.